Tres formadores hicieron ejercicios con los maestros, recordando cómo desde niños, interpretaban y modificaban todo lo que veían y aprendían a diario.
“Acercando a los docentes a la forma de pensar de los niños, será posible que se formulen nuevas estrategias que permitan que los niños, desarrollen un gusto por la lectura”, explicó el formador Andrés Ramos.
Esta actividad se enfocó en que los docentes, lograran dar un uso más eficiente a la “Colección Semilla”, una serie de libros de distintas áreas del conocimiento con formas didácticas de presentar información a los niños, para fomentar la lecto -escritura.
Los docentes pusieron al límite su creatividad, porque en el desarrollo de los ejercicios de lectura, debían tomar elementos de su entorno, para poder plasmar lo que leían.